Diablodado Pelón hará todo lo que sea necesario para desprestigiar a Bigote Panzón

 

Capitulo II

Las Aventuras de Bigote Panzón

Por Germán Carías/GCIDA2023®

Era ya su último día de entrenamiento y en la Súper Liga se hacían apuestas. 

— Voy con mil Chavepetros a que Bigote Panzón vuelve a romper otra cuerda de entrenamiento.

Todas las veces que el paladín, Bigote Panzón, subió por la soga con nudos, la cual debía trepar hasta la cima y agarrrar una banderilla, la misma se reventó debido al sobrepeso del héroe galáctico. Al punto que en la semana dos del adiestramiento el obeso justiciero rodó por las escalinatas del gimnasio tumbando como si fueran unos pines de bowling a Chavetón, Castrol y Miquellano. Chavetón logró salir ileso porque sus brazos que eran largos, parecidos a los de un orangután, le permitieron columpiarse de la lámpara que ilumina el pasillo. Castrol rebotó hasta cinco veces y cayó sobre una fotocopiadora que tenían afuera para llevarla a reparar. Demás está decir que el pañal de Castrol se ensució, aunque en esta ocasión salieron decenas de copias para demostrarlo. Miquellano perdió la dentadura postiza con el tanganazo y el peluquín de pelo de hiena fue a dar al container de basura al atravesar la ventana. Ambos fueron llevados a emergencias y recibieron atención médica.

— Yo le meto a esa apuesta dos mil Chavepetros a que fractura a otro líder de la Súper Liga.

Castrol y Miquellano fueron enyesados uno en un brazo y otro en una pierna respectivamente. Para Chavetón ese accidente le permitió estar más tiempo en el poder. Sin embargo todo lo que había planeado, el cagalitroso Castrol, seguía viento en popa. El yeso en su brazo no era impedimento de continuar con su proyecto al cual había llamado “Panza Patria”. Ya el mejunje que había elaborado el laboratorio farmacéutico “El Último Récipe” estaba haciendo efecto. Días atrás, Bigote Panzón, había besado la mano de Castrol y se había recostado en su pañal. Sin embargo, Castrol, sabía que no podía cometer errores por la cercanía que Diablodado Pelón mantenía con Chavetón. Diablodado Pelón era compañero de armas de Chavetón, ambos fueron a la misma academia militar “La Bala Perdida”, los dos se graduaron al secuestrar al director del centro y amenazarlo con liquidar a su familia. Diablodado y Chavetón lideraron la asonada contra el Rey Maligno. Eran “amigos”,

— Dame mis diez mil Chavepetros. Les dije que iba a romper la cuerda y fracturó a Bacinilla. 

Bigote Panzón estaba listo para hacerse cargo de la seguridad de Veneluz. Los científicos de la Súper Liga lo habían dotado con tecnología de punta y sin dudas era el héroe del momento. Sin embargo algunos no pensaban igual y querían desprestigiar al paladín. Diablodado Pelón había regado el rumor que, Bigote Panzón, se debilitaba al escuchar la música de Vallenato, porque en realidad era un habitante infiltrado de Colombianga, un planeta que pertenecía al grupo de rebeldes que querían acabar con la Súper Liga. La verdad era que cuando, Panzón, escuchaba el Vallenato comenzaba a dar alaridos y lloraba cual mocoso, inclusive se ponía a beber Aguapiche un licor bandera de los depravados colombianangos. Bigote Panzón también era asiduo a usar un sombrero que llamaban “el al revés” sinónimo de patriotismo colombianganense. Diablodado tenía la labia necesaria para iniciar un chisme y que fuera creíble. 

Y así fue como todos en la Súper Liga comenzaron a llamar al Bigote Panzón “el colombianiche”.

Continuará…

Te invitamos la próxima semana a leer las Aventuras de Bigote Panzón.

Es un cachalote, es un paquidermo, no… Es Bigote Panzón… Más rápido que “guachiman” nocturno de banco, más fuerte que el ego de Chavetón, es…Bigote Panzón.

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